Ruta: Las Angosturas de Albuñol
Distancia: 6.2 km
Tiempo estimado: 2 horas
Dificultad: Baja
Hoy decidimos salirnos de la provincia e ir a la de Granada,
para hacer las Angosturas de Albuñol.
En esta ruta nos acompaña un nuevo fichaje, Mari Carmen.
El inicio de ésta empieza en la rambla Aldaya.
Nada más llegar al pueblo nos encontramos una rotonda con
una gran bandera de España, giramos a la derecha por la calle Andalucía. Solamente
hay que seguir esta calle hasta el final y nos encontraremos la rambla de frente
con unos cuantos aparcamientos. En esta calle también encontramos varios
murales explicativos de la ruta y de la zona.
Nada más empezar a andar vamos viendo diversos carteles
de las diferentes rutas. La gran mayoría discurren por la misma rambla.
Nos encontramos un antiguo molino “Los Arcos”.
Aquí ya empieza la rambla a estrecharse y a mostrar su
encanto. Conforme vamos avanzando se va viendo la erosión de la piedra por el
agua.
En nuestro camino nos topamos con una gran piedra. Se
puede pasar por debajo, pero detrás tenemos una pared vertical de casi cuatro metros con una cuerda para
subir, que es casi imposible de escalar por lo resbaladiza que esta la piedra.
Decidimos retroceder y encontramos la variante para
rodear este desnivel. Esta marcado con pintura en algunas piedras en el suelo a
la derecha de la rambla conforme retrocedes. Así que ahora toca subir un poco
para luego volver a bajar a la rambla más adelante.
En algunos momentos es necesario el uso de las manos para
poder continuar por la rambla. Incluso en algunos obstáculos hay cables para
agarrarse y alguna que otra escalera de hierro y cuerdas.
Nos encontramos un camino que viene desde la izquierda por
el cual subimos. En su principio es una leve subida hasta llegar a la cima del
cerrillo, la que nos da vistas al barranco y a cultivos de almendros.
Conforme vamos descendiendo por nuestro camino, cambiamos
los almendros por los invernaderos.
Este camino nos deja junto al molino y ya solo nos queda
bajar hasta el coche.
Para finalizar hacemos una parada en el bar FERNANDO,
para tomar unas cervezas fresquitas y unas tapas buenísimas.